CCOO de Castilla y León | 25 abril 2024.

2019-02-21

Más movilización para que el morado impregne las conciencias en pos de una igualdad real en todos los órdenes

    Cerca de 500 personas, entre delegados, delegadas y dirigentes de CCOO y UGT procedentes de toda la Comunidad han mostrado esta mañana su fuerza y su convencimiento pleno para luchar, de verdad, por la igualdad entre las mujeres y los hombres en todos los órdenes de la vida. En una asamblea multitudinaria, a modo de pistoletazo de salida para la cita del próximo día 8 de marzo, las y los responsables de ambas organizaciones sindicales han demandado a la gente congregada en el auditorio número 2 de la Feria Internacional de Muestras de Valladolid que en esta oportunidad hay que tomar la calle con más contundencia que en 2018. El morado debe ser el color predominante durante el Día Internacional de la Mujer.

    21/02/2019.
    Diversos instantes de la asamblea de delegados y delegadas de CCOO y UGT previa al 8M.

    Diversos instantes de la asamblea de delegados y delegadas de CCOO y UGT previa al 8M.

    El acto, que fue conducido por la secretaria de Mujer y Políticas de Igualdad de CCOO de Castilla y León, Yolanda Martín, y la secretaria de Igualdad y Juventud de UGT de Castilla y León, Ana Isabel Martín, tuvo un componente reivindicativo desde el primero hasta el último minuto de las dos horas que duró. Yolanda Martín apeló a que los 365 días del año son 8 de marzo, “si de verdad queremos luchar con convencimiento por la igualdad”. Y todo ello amparado por una gran pancarta instalada en la parte de atrás del escenario en la que se podía leer “Igualdad. Más hechos. Menos palabras. YA sumando fuerzas”.

    Nuestra compañera puso en valor lo acontecido el 8M de 2018. “Fue un hito histórico. Se superaron todas las expectativas. Fue una gran explosión en la que tanto mujeres como hombres dijimos basta ya a esta situación. Queríamos visibilizar esta gran discriminación, y lo logramos, pero luego Gobierno y patronal no han hecho nada para trasladarlo al día día”, señaló. También indicó la importancia del trabajo que realiza el movimiento feminista en esta ardua tarea, “de ahí la necesidad de ir de la mano con ellos en esta larga lucha”.

    “Estoy cambiando aquellas cosas que no puedo aceptar”

    La secretaria confederal de Mujer e Igualdad de CCOO, Elena Blasco, abrió su intervención remitiéndose a una célebre frase de Angela Yvonne Davis, filósofa, política marxista, activista afroamericana, antirracista, feminista y profesora de Historia de la Conciencia en una universidad norteamericana, que decía: “Estoy cambiando aquellas cosas que no puedo aceptar”. “Y como tanto el ámbito laboral como el social no es bueno para las mujeres, no lo acepto y me rebelo”, subrayó Blasco.

    La responsable confederal de Mujer de CCOO puso en solfa la idea de que el salario de las mujeres es solo un complemento económico para la unidad familiar. Esto supone cuestionar y minusvalorar, tanto cuantitativamente como cualitativamente, la aportación productiva de las mujeres en la sociedad actual. “Esta realidad nos hace más vulnerables y con más riesgos de caer en la pobreza. Esto es lo que venimos a denominar como una violencia más, la económica. Es producto de todas las anomalías estructurales que sufrimos, y no lo debemos consentir”, ratificó.

    Elena Blasco volvió a poner sobre el atril la doble discriminación de la mujer, la de género y de clase. Pidió a la concurrencia que “no podemos ser forenses de los fríos datos”. También apeló a la responsabilidad de este Gobierno antes de abandonar la Moncloa, “para instalar la agenda social en el centro del debate. Y ahora toca actuar ya sobre la igualdad. Nuestra lucha va más allá de la política y no termina el 8M. Nuestro clamor, vivas, libres y unidas seguirá atemorizando a esa caverna que no quiere nuestra ansiada igualdad”.

    “La desigualdad es un problema estructural”

    El secretario general de CCOO de Castilla y León, Vicente Andrés, fue el encargado de cerrar el acto. Abrió su intervención indicando que la desigualdad debe dejar de ser un problema estructural de la clase trabajadora. “Donde más se produce la desigualdad es en los centros de trabajo, pero luego se proyecta al resto de la sociedad, de ahí la necesidad conjunta de mujeres y hombres para revertir este desequilibrio. ¿Cómo? Por medio de la movilización y la negociación”, señaló.

    Se trata de una lucha de fondo. “La historia nos ha demostrado que los avances se producen poco a poco, y que las grandes transformaciones se han producido a lo largo del tiempo. No existen logros inmediatos, y sí luchas permanentes. Y la conquista por la igualdad es una lucha del movimiento obrero en su conjunto, no solo de las mujeres”, sentenció nuestro secretario general.

    En estos momentos previos a la cita del 8M, Vicente Andrés apeló a la célebre frase de nuestro fundado Marcelino Camacho (“Ni nos domaron, ni nos doblaron, ni nos van a domesticar”) para continuar con la lucha por la igualdad. “Pedimos a la Junta y a la Inspección de Trabajo que hagan cumplir las normas. Ellos deben ejercer el control de la legalidad para que se cumpla con ella en materia de igualdad en las empresas. Los sindicatos apenas llegamos a 4.000 empresas, pero en Castilla y León hay más de 60.000, y son en estas otras donde más se producen estas desigualdades”. Para renglón seguido pedir responsabilidades a la patronal, “por hacer trampas a la hora de interpretar correctamente la igualdad en los convenios colectivos”.

    Cerró su intervención apelando a la necesidad de acudir a las urnas, tanto el 28 de abril como el 26 de mayo, “ya que las previsiones no nos son favorables. Debemos ir a votar de forma masiva, pero sabiendo a quién debemos apoyar con nuestro voto”, subrayó.

    Además de los representantes de UGT, también tuvo una presencia activa la representante de la Coordinadora de Mujeres de Valladolid, Nina Infante. “Es todo un placer estar hoy aquí, en una cita en la se unen lazos feministas y sindicalistas en pos de la igualdad”.

    Esta mujer pidió al público asistente que este año toca hacer lo mismo con la Ley de Igualdad que, en los 90 con la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. “Tenemos que impulsar la lucha para que los derechos de las mujeres sean reconocidos de una vez por todas. Y esto es algo que también afecta a los hombres. Por lo tanto, el próximo 8M hay que coger el toro por los cuernos. No hay que dar ni un paso atrás”. Y cerró su intervención de una forma rotunda: “La revolución será feminista, o de lo contrario no será”.