Esta primera jornada ha servido de apertura de un calendario de huelga con otras trece citas pendientes que se desarrollarán durante los días 23, 25 y 30 de enero, y 1, 5, 6, 8, 12, 13, 14, 19, 20 y 21 de febrero. “Siempre y cuando la empresa persista en su proceder. De cambiar y alcanzar un acuerdo, entonces no seguiríamos con el calendario de movilizaciones previsto”, apuntó nuestro compañero.
Santos denunció también que la propia empresa obligó a algunos trabajadores y trabajadoras “a ir a la Guardia Civil a poner denuncias en contra del piquete porque no podían entrar, cuando a las puertas de la fábrica, situada en la localidad leonesa de Soto de la Vega, ha habido un piquete informativo que dejó entrar a aquellas personas que lo consideraron, pero que ha intentado hacer ver a los trabajadores y las trabajadoras la situación de fraude que viven dentro del sector cárnico”.
Para esta primera jornada de huelga, según apuntó el responsable de CCOO, Embutidos Rodríguez estableció unos servicios mínimos de la totalidad de los trabajadores, “lo que es totalmente abusivo y ante lo que hay que tomar nota, ya que no es un servicio esencial para la comunidad, por lo que no se deben establecer servicios mínimos, y menos aún con la totalidad de la plantilla”.
Por su parte, el responsable estatal del sector cárnico de Comisiones Obreras, Vicente Canet, recordó que Castilla y León es uno de los principales motores del sector cárnico del país, y que en este momento luchan contra la figura de los falsos autónomos. “Ante la situación concreta de las personas trabajadoras de Embutidos Rodríguez, que tienen un acta de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social en la que se dice que son trabajadores del Régimen General de la Seguridad Social y de la empresa, pero que la compañía no lo acata al no considerarlos como trabajadores propios de la plantilla”.
Una situación que, tal y como apuntó Canet, “no está generalizada en España, pero que afecta a unas 20.000 personas en todo el país, de las que ya se ha regularizado a 6.000, una tónica general que hace que las empresas cárnicas vuelvan a la legalidad, pero ante la que algunos grupos industriales, como es el caso de Embutidos Rodríguez, se resisten a acatar las resoluciones de la Inspección de Trabajo”.
Ante ello, ambos representantes de CCOO realizaron durante la mañana de ayer un llamamiento a la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León para que intervenga, porque “la Junta se debe involucrar y debe interceptar la situación, porque no es posible que los trabajadores y las trabajadoras continúen en una situación de fraude”.